Encuentro

Una mujer camina a mi lado, no la sentí llegar. Me habla de lugares que no conozco, toca mi brazo derecho, sonrío sin comprender por qué, pues muchas de sus palabras me suenan extrañas. De pronto, llegamos a una esquina y la luz de un farol que ilumina la calle me permite ver sus facciones: es muy joven, creo conocerla pero cuando estoy a punto de recordarla se despide; la veo alejarse en la oscuridad, entonces me doy cuenta de que debe ser muy tarde y vuelvo sobre mi paso, aunque no sé para qué.

He caminado algunas calles y recuerdo su nombre, su voz; la tibieza de su beso en mi mejilla al irse, es lo único que tengo de ella, eso y sus palabras quizá sin sentido, pero el tono de su voz será lo más preciado para mí desde ahora.

¿Qué hice antes de caminar por aquí? No sé. Creo que desde que existo camino por esta calle; ha cesado la lluvia y quizá pronto amanezca. Ya no tengo frío. Alguien se acerca. Me cubre con una manta seca y dice dos palabras que no entiendo. Caminamos en silencio. La calle es tan larga.
Le hablo de mi madre, sonríe, y dice: "Sí, así es la muerte".

Cuando quiero acercarme a mi madre me pongo a recordarla en silencio

y logro atraerla a mí, envolverme en ella y desvanecerme en ella.

...Pero la luz que había de aclarar mis ojos me faltaba.

In Memoriam:

10-06-1931 > 29-01-1993

Pepegramas 9

Simplemente... ¡más!
Este año voy a intentar vivir la vida simplemente... ¡más!
Intentaré ser menos metódico, me relajaré más.
Seré menos obsesivo y más tolerante.
Seré un hombre más útil y menos hábil.
Trataré de ser menos arrogante y más humilde.
Seré menos neurótico de lo que he sido, me tomaré la vida más ligera.
Manejaré menos y caminaré más. Veré menos televisión y leeré más.
Conviviré más con mis seres queridos.
Escucharé más a mi hijo y menos las noticias.
Dejaré de preocuparme, gozaré más los buenos momentos.
Seré menos misántropo y más sociable.
Seré menos taciturno y más alegre.
Tomaré menos antioxidantes y haré más ejercicio.
Disfrutaré más los fines de semana.
Viviré para disfrutar la vida, simplemente... ¡más!

Cuando uno no vive como piensa, acaba pensando como vive.

Si quieres ser dichoso
Si quieres ser dichoso, no te dejes llevar por locas vanidades.
No ambiciones jamás lo que no debas, sin dejar de luchar y de soñar.
Espera con paciencia el bien que ha de llegar, y nunca te arrepientas de ser humano aunque te juzguen mal.
Haz todo el bien que puedas. Más no esperes gratitud, ni bondad.
Si quieres una conciencia tranquila, si anhelas la quietud y el bienestar, aléjate del mundo y sus miserias, y vive haciendo el bien a los demás.

Despójate del yo personalista, cuyo egoísmo es tal, que te hinca el acicate de su envidia y te hace ruin ante la humanidad.
Si quieres ser dichoso huye de halagos y vanidades.

La vida... ¡es sólo un sueño que pasará fugaz!

¡Hasta el próximo!...

Consejos para ser feliz

(...)

Al abrir los ojos por la mañana, dite a ti mismo:
¡Qué maravilloso es estar con vida! Este año me debe ir mucho mejor.

Alégrate cuando vuelvas a tu trabajo. Siéntete feliz de contar con un empleo en estos tiempos de crísis económica. Aprovecha al máximo tus horas de trabajo. No te sientes, ni empieces a flojear cuando debas enfrentar tus responsabilidades, llévalas a cabo con entusiasmo.

No te dejes agobiar por tus problemas económicos. Para los más de nosotros, que no podemos darnos el lujo de ser extravagantes, sencillamente ahorrar dinero para adquirir un artículo puede darnos un sentimiento de gran satisfacción.
No te compares con los demás, la gente que lo hace tiende a la melancolía.
Sé menos crítico. Acepta tus limitaciones y las de tus amigos.
Concéntrate en tus habilidades y en las de ellos.
Mejora tu sentido del humor. No te tomes demasiado en serio, trata de encontarle el lado humorístico a los momentos de adversidad.
Toma tu tiempo. No trates de hacerlo todo a la vez.
Sonríe más a menudo, a más personas.
Nunca te olvides de que tú controlas tu propia vida. Convéncete:
"Yo estoy a cargo de lo que me pase, yo soy el único responsable".

El tiempo te obsequia un libro en blanco. Lo que en él escribas será de tu propia inspiración. De ti depende elegir la tinta arcoiris de la dicha o la gris y opaca del desaliento y la amargura, las palabras amables del lenguaje del amor o el relato tenebroso y destructor del odio.

¿Qué escribirás amigo, en el primer día del año que está por iniciar?

La vida debe ser un cúmulo de experiencias para disfrutar,

no para sobrevivir.

¡Hasta la próxima!...