Para leer, saboreando un aromático té

Simplemente SER
Una mujer en agonía, de pronto tuvo la sensación de que era llevada al cielo y presentada ante el tribunal.
¿Quién eres?, dijo la voz.
Soy la mujer del alcalde, respondió ella.
Te he preguntado quién eres, no con quién estás casada.
Soy la madre de cuatro hijos.
Te he preguntado quién eres, no cuántos hijos tienes.
Soy una maestra de escuela.
Te he preguntado quién eres, no cuál es tu profesión.
Soy una católica.
Te he preguntado quién eres, no cuál es tu religión.
Soy una persona que iba todos los días a la iglesia y ayudaba a los pobres y necesitados.
Te he preguntado quién eres, no lo que hacías.
Tu obligación era SER.
No un personaje ni ser un don nadie.
Sino simplemente SER.

Ser tú mismo es lo único que puedes Ser.

No tengo tiempo

Se arrodilló para orar, pero no por mucho tiempo, tenía mucho que hacer. Debería apurarse e ir a trabajar por las obligaciones que tenía que cumplir. El deber para con Dios había sido satisfecho, su alma estaba en paz.

A través del día, no tuvo tiempo para decir una palabra de aliento, no tuvo tiempo para hablar de Él a un amigo. Temía mucho a las burlas de sus compañeros.

-No tengo tiempo, no tengo tiempo-, hay mucho por hacer. Esa era su diaria y constante queja:-No tengo tiempo para dar a aquellos en necesidad-.

Finalmente, llegó el tiempo de morir.

Cuando estuvo frente al Señor, se presentó con los ojos entrecerrados.

En sus manos, Dios sostenía un libro, era el libro de la vida.

Él buscó en el libro y dijo:

No puedo encontrar tu nombre. Una vez lo iba a escribir...

¡Pero no tuve el tiempo!

Cuando te conviertas en alguien importante,

observa que realmente no eres tan importante.

Tiempo Completo

Hay personas en este mundo que son alegres, y parecen poseer más energía que el resto de nosotros. Esto es porque no la desperdician en represión y auto-contemplación.

Sentirse miserable no es un pasatiempo, sino un trabajo de tiempo completo.

Si piensas que eres maltratdo continuamente,

tú estás cooperando con el tratamiento.

¡Saboréenlos hasta el final!...